El presidente dejó plantados a los periodistas en el brindis para recibir al ministro durante más de hora y media.
Alberto Fernández suspendió su agenda de urgencia luego del pronunciamiento de los gobernadores contra las PASO para recibir a Sergio Massa durante más de una hora y media.
El presidente dejó plantados a los acreditados que lo esperaban para brindar por el día del periodista porque recibió al ministro de Economía en su despacho. Al término del encuentro tanto los voceros de Alberto como los de Massa dijeron que en la reunión sólo se trataron temas de gestión y de la reciente visita a China del ministro. Poco creíble.
La tensión política ante la cercanía del cierre de listas del 24 de Junio es evidente. Más temprano, los gobernadores se reunieron en el CFI para pedir lista única y terminar con el juego entre Daniel Scioli y Wado de Pedro, que puede desembocar en un Waco peronista.
El encuentro entre Massa y Alberto se produjo luego de semanas de extrema tensión, que se agravaron luego que el Presidente apoyara abiertamente las candidaturas de Scioli y Tolosa. Desde su regreso de China, Massa se negó a atender los llamados de Alberto, hasta que este miércoles el diputado Leandro Santoro, cercano al Presidente, lo elogió por radio, en lo que se entendió como un mensaje de acuerdo de la Casa Rosada.
En el Gobierno esperaban que a pesar de las tensiones, y acaso gracias a ellas, lo natural era que antes del cierre de listas alguno de los socios fundadores del Frente de Todos convocara a la mesa chica de Cristina, Alberto y Massa -con participación de los gobernadores y la CGT- para ordenar las candidaturas, como ocurrió en el 2019.
Esto parece estar sucediendo: Massa se habría reunido con Cristina Kirchner en el Senado, en medio de las amenazas de ruptura por parte del Frente Renovador. El ministro hoy es objetivamente el articulador de ese trío, pero si prevalece la sensatez no sería extraño que en algún momento Cristina y Alberto hablen directamente.
Esta situación abre interrogantes sobre la continuidad del escenario de primarias que construyeron Daniel Scioli y Wado de Pedro, que además del riesgo que plantea sobre la precaria estabilidad económica, tiene el inconveniente que pone al peronismo ante la posibilidad cierta de salir tercero o cuarto en las PASO, quedando en pésimas condiciones para la elección general.