El distrito sigue siendo noticia por dos nuevos hechos. Una mujer salió a robar con su hijo de tres años y la detuvieron. Además, un escándalo interno: un vigilador del Hospital de Morón agredió a un empleado y el familiar de un paciente, por lo que fue despedido de la Municipalidad.
E.G, una mujer de 26 años oriunda de Isidro Casanova, beneficiaria de varios planes sociales, fue arrestada anoche por personal de la Comisaría 2° de Morón de la Policía Bonaerense junto a dos cómplices en la esquina de Perón y Colihue. Fue acusada de robo en banda y encubrimiento. Según la imputación en su contra, la banda intentaba un escruche en la zona, ingresar en la casa de un vecino para desvalijarlo. El vehículo de fuga era un Ford Focus blanco. En el auto, los efectivos de la Policía Bonaerense encontraron al hijo de la mujer, de tres años de edad.
La alerta llegó del propio vecino, un joven de 22 años que cruzó un patrullero en plena noche y señaló el Focus, que tenía las balizas encendidas. “Los del Focus me quisieron robar”, gritó, vestido con bermudas y el torso desnudo. Poco después, los sospechosos, todos ellos con domicilio en Isidro Casanova tal como E.G, fueron arrestados, según confirmaron fuentes del caso.
La víctima aseguró que, mientras dormía, escuchó ruidos en la puerta de su casa, como si quisieran abrirla. Al despertar, salió al patio y vio a los sospechosos, que al verlo huyeron. La banda tenía un kit para violentar la entrada: dos pares de guantes de trabajo y un cortador de metal hidráulico. El candado en la entrada había sido violentado.
Por otro lado, un indignante hecho de violencia se dio durante la tarde de ayer en el Hospital de Morón: un vigilador quiso evitar que un allegado visite a un paciente internado, este comenzó a filmarlo y en el medio agredió a un empleado, razón por la que fue despedido inmediatamente del Municipio.
Fuentes oficiales del Municipio calificaron el episodio como “absolutamente injustificable y repudiable” e informaron que el hombre era un empleado de vigilancia del Hospital quien ya no forma parte del sector público tras ser desvinculado de forma casi automática. Las imágenes se viralizaron después de que una de las víctimas lo publicara en sus redes sociales.
En el video se aprecia como el ahora extrabajador de seguridad intentó expulsar de uno de los cuartos a un familiar porque el tiempo de visita ya había terminado, a lo que este último le responde que no tenía ninguna razón de decírselo de forma violenta mientras lo registraba con la cámara de su teléfono celular.
Esta situación hizo que enfermeras y doctoras del nosocomio ubicado en la calle Doctor Rodolfo Monte al 848, entre Córdoba y Juan José Castaños, intercedieran para calmar los ánimos, pero todo se fue de las manos cuando el empleado de seguridad empujó y posteriormente golpeó a un cocinero que solo quería separar.
De esta manera, el atacante tomó un casco (que luego devolvió) y procedió a irse de la sala increpado por el resto de los presentes, no sin antes pelearse verbalmente con casi todos los que presenciaron su agresión. “Fue terrible. Se ve que este muchacho estaba demasiado pasado de revoluciones y por eso lo desvinculamos de inmediato”, completaron las fuentes.
A su vez, algunos de los vecinos aseguraron que no es la primera vez que actuó así y que “se cree el presidente” del centro de salud, en tanto que otros especularon con que había consumido sustancias prohibidas.