La Justicia consideró que Yanina Marotte, cabo de la Policía Federal, actuó en legítima defensa al disparar contra uno de los delincuentes que la asaltaron. El hecho ocurrió en marzo pasado y la oficial fue sobreseída tras confirmarse que su reacción fue proporcional al peligro percibido.
El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 15 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sobreseyó a Yanina Marotte, cabo primero de la Policía Federal Argentina (PFA), quien abatió a uno de los dos delincuentes que la asaltaron el 6 de marzo en Ciudad Madero, partido de La Matanza. La jueza Karina Zucconi consideró que Marotte actuó en legítima defensa, cerrando así el proceso judicial en su contra.
El episodio ocurrió cuando la oficial se encontraba en la colectora de la Avenida General Paz y Pedro de Mendoza, saliendo de un kiosco mientras usaba su teléfono celular. En ese momento fue abordada por dos ladrones. Según relató la propia Marotte, uno de ellos la tomó por el cuello mientras otro la golpeaba en la cabeza con un arma, que luego se determinó era una pistola de plástico.
“Siento que de atrás me agarran del cuello y veo un arma. Enseguida siento golpes en la cabeza”, contó Marotte tras el hecho. Los delincuentes le sustrajeron el celular y escaparon corriendo, momento en el que la policía se reincorporó y disparó dos veces, impactando a uno de los asaltantes, Maciel Vallejos, en el pecho. Vallejos murió producto de las heridas.
La decisión judicial
La jueza Zucconi resolvió el sobreseimiento basándose en la legítima defensa, coincidiendo con el dictamen del fiscal Recchini. Según el informe del fiscal, Marotte actuó bajo el convencimiento de que el arma que portaban los atacantes era real, y reaccionó de manera proporcional al peligro que percibió en ese momento. La resolución también se apoyó en las pruebas recolectadas, incluyendo grabaciones de cámaras de seguridad y el análisis de peritos del Laboratorio de Multimedia Forense.
“La reacción de la policía fue legítima, al no poder distinguir que el arma era de juguete y tras haber sido golpeada en un contexto de agresión inminente”, indicó el fiscal en su presentación. Además, destacó que no había pruebas suficientes para sostener una acusación penal contra la oficial.
El defensor de la familia del delincuente fallecido, Pablo Rovatti, intentó que la causa continuara bajo la figura de “homicidio agravado”, pero la jueza desestimó ese pedido, alegando que las pruebas no sostenían dicha acusación. Con esta decisión, se declaró extinguida la acción penal por la muerte de Vallejos, cuyo deceso fue atribuido a las heridas de bala recibidas en el pecho.
Un caso de legítima defensa
La decisión del juzgado dejó en claro que el accionar de la oficial fue en defensa propia. El caso generó amplio debate en la opinión pública, dado que situaciones de inseguridad y respuestas por parte de las fuerzas de seguridad suelen polarizar a la sociedad. Las pruebas y los testimonios recolectados coincidieron en que Marotte fue atacada por sorpresa y que su reacción estuvo dentro de los parámetros legales establecidos por el Código Penal para la legítima defensa.